Los daños causados por parte de un médico en el ejercicio de su profesión de forma incorrecta forman parte de la negligencia médica y constituyen un delito. Ahora bien, ¿se puede demandar la responsabilidad penal por negligencias médicas? En este artículo daremos respuesta a esta pregunta.
Cuál es la responsabilidad penal por negligencias médicas.
En primer lugar, es necesario comprender los diferentes grados de negligencia que existen antes de proceder al análisis de la responsabilidad penal. Como mencionamos en el párrafo de introducción, para que un médico cometa un delito y sea penalmente responsable, debe actuar con dolo. Y, en el ámbito que nos ocupa, se refiere a dolo cuando se sabe que se está causando un daño y no se intenta solucionar. Sin embargo, es necesario tomar en cuenta que no todos los actos dolosos pueden ser perseguidos como delitos, pues deben estar incluidos específicamente en el Código Penal. Además, la responsabilidad penal desencadena la responsabilidad civil, por lo que el paciente puede exigir la indemnización del daño.
En general, hay muchos actos delictivos especificados en el Código Penal. Algunos son el delito de homicidio imprudente, el delito de descubrimiento y revelación de secretos, los delitos de lesiones y los delitos de manipulación genética, por mencionar algunos. Además, en circunstancias excepcionales en las que se perciba una acción intencional, se puede iniciar acciones judiciales penales por negligencia médica. Sin embargo, es importante tener en cuenta que se desaconseja el enjuiciamiento penal a menos que existan pruebas concluyentes que prueben la negligencia y el dolo.
Cabe destacar que los médicos pueden incurrir en una variedad de responsabilidades en el desarrollo de su profesión. En primer lugar, podemos hablar en términos estrictamente colegiados de la responsabilidad disciplinaria. Dependiendo de sus calificaciones, puede estar sujeto a medidas disciplinarias por mala conducta profesional, sin que esto acarree de forma automática algún tipo de responsabilidad penal. En segundo lugar, existe la responsabilidad civil, la cual habitualmente deriva en una compensación monetaria para los pacientes lesionados. Esta compensación puede ser considerada específicamente según sea contractual o extracontractual. Evidentemente, la mayoría de demandas relacionadas con diligenciasmédicas se relacionan con la responsabilidad civil.
Por último, existe la responsabilidad penal, a través de la cual los médicos se enfrentan a sanciones penales, inhabilitación profesional, multas e incluso prisión. Sin embargo, la sanción penal no obliga a los médicos a pagar indemnizaciones a las víctimas, pues está se deriva de la responsabilidad civil. Esto significa que deben coexistir ambas con la finalidad que el facultativo sea sancionado conforme a derecho y, al mismo tiempo, la víctima sea resarcida del daño.
Causas de responsabilidad penal por negligencia médica grave.
A continuación, se mencionan algunos actos que pueden calificarse como negligencia médica grave y que conllevan una pena por considerarse delitos.
- Delito de homicidio por imprudencia: El paciente fallece a consecuencia de la negligencia médica.
- Pérdida o incapacidad de cualquier órgano principal, infertilidad, daño sensorial, deformidad.
- Aborto no consentido: esto significa que se causa la muerte del bebé no nacido.
- Pérdida de órganos no principales.
- Lesiones que amenacen la integridad física o psicológica y que no requieran tratamiento quirúrgico posterior.
- Lesiones que vulneren la integridad física o moral y que requieran tratamiento quirúrgico posterior.
- Lesión que interfiere con el desarrollo fetal o causa deterioro físico o psicológico.
Ahora bien, a diferencia de la negligencia grave, la negligencia leve es un incumplimiento más limitado. En el pasado, ambos tipos de negligencia eran considerados como delitos, aunque con sanciones considerablemente distintas. Pero después de la revisión del Código Penal el 1 de julio de 2015, las faltas leves ya no se tipifican como delito.
Por supuesto, lo mejor es asesorarse con un abogado experto en negligencias para saber qué procede en cada caso.