La noticia informa sobre la confirmación por parte de la Audiencia Nacional de que ocho empresas y dos asociaciones formaron un cártel en la industria lechera, lo cual ha llevado al sindicato Unió de Pagesos a instar a los ganaderos a reclamar judicialmente la indemnización por los «abusos» cometidos.
Es preocupante que se haya confirmado la existencia de un cártel en la industria lechera, ya que esto implica una clara violación de las normas de competencia y perjudica tanto a los ganaderos como a los consumidores. El hecho de que varias empresas se hayan unido para fijar precios y repartirse el mercado demuestra una falta de ética empresarial y una clara intención de obtener beneficios a expensas de los demás actores del sector.
El sindicato Unió de Pagesos tiene razón al instar a los ganaderos a reclamar judicialmente la indemnización por los daños y perjuicios sufridos. Los ganaderos han sido víctimas de estos abusos durante años, y es justo que puedan recuperar parte de las pérdidas sufridas. La cifra de entre 25.000 y 35.000 euros por año de producción entre 2000 y 2013 parece razonable y proporcionada al daño causado.
Es lamentable que la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC) haya sido acusada de «falta de diligencia». La CNMC es la encargada de velar por el cumplimiento de las normas de competencia y evitar la formación de cárteles, por lo que su ineficacia en este caso es preocupante. Además, es preocupante que algunas multas deban ser recalculadas a la baja debido a que algunos periodos ya han prescrito. Esto implica que las empresas infractoras no recibirán las sanciones que merecen, lo cual es injusto y envía un mensaje equivocado a otras empresas que puedan estar pensando en cometer este tipo de prácticas ilegales.
El sindicato también destaca la vulnerabilidad del sector debido al aumento de los costes y la sequía, y reclama un cambio estructural en el sistema que garantice el cumplimiento de la legislación y el reparto equitativo del valor añadido entre los agentes de la cadena de valor de la leche. Estas demandas son justas y necesarias para asegurar un sector lechero sostenible y justo para todos los actores involucrados.
En conclusión, la confirmación de la existencia de un cártel en la industria lechera es una noticia preocupante que pone de manifiesto la falta de ética empresarial y la vulnerabilidad de los ganaderos. Es necesario que se tomen medidas legales para que los ganaderos puedan reclamar la indemnización que les corresponde y se garantice un sector lechero justo y sostenible. Además, es fundamental que la CNMC cumpla con su deber de velar por el cumplimiento de las normas de competencia y sancione adecuadamente a las empresas infractoras.